¿Cuántas veces es el miedo quien se apodera de nosotros?
Esa sensación de impotencia para hacer algo, ese muro que separa la realidad de mis sueños.
¿Quién dice que sea malo? Hay veces que debes plantar la cabeza para ver todas las posibilidades a las que te sometes, pero jamas permitas que porque las estadísticas te lleven a algo que no es lo que deseas, no porque puedas perder, no por eso dejes de apostar por lo que quieres, porque siempre esta esa oportunidad, tal vez caigas, pero ¿no es más lo puedes ganar?
He tropezado, pero pronto me levantaré; cuando lo consiga seguiré cayendo, y así por demasiado tiempo, pero nunca tiempo perdido. Cada caída, cada golpe, cada cicatriz sirven de lección.
Nunca te arrepientas de los errores que cometiste, arrepiéntete de los momentos no vividos por miedo a cometer un error.

No hay comentarios:
Publicar un comentario