martes, 4 de diciembre de 2012

-Hola.
-¿Qué haces aquí después de tanto tiempo?.
Avergonzado él respondió-Ya, sé que es raro, pero aquí estoy y quiero pedirte perdón-contestó con los ojos llenos de sinceridad.
Sorprendida respondió -¿Perdón por qué?
-Sí, perdón por si alguna vez te hice sufrir -respondió- te pido perdón por cada lágrima que derramaste en vano por mi y cada segundo que me pensaste sin resultado alguno.
Ella seguía completamente perpleja ante esa situación. -¿Y por qué has venido a decirme esto? El tiempo a pasado y no creo que fuese un problema olvidar lo que  un día pasó entre nosotros...-
-Sin embargo estoy aquí -volvió a decirle- Como tú bien dices es cierto que el tiempo ha seguido pasando y yo no he olvidado. No digo ninguna mentira si te digo que no hay día que no te recuerde y noche en la que no te añore. Has seguido con tu vida, pero con esto no pretendo que volvamos, hasta podría comprender que después de todo lo que pasó no me perdonaras. -se puso la mano en el corazón para indicar que lo que decía era lo que de verdad sentía y le dijo- Quiero que recuerdes la promesa que un día nos hicimos: "te querré, pase lo que pase", hoy ese momento, han pasando cosas y otras han cambiado, pero intento comprender si aquella promesa era lo que sentiste un día o fue una promesa por la que lucharías cada día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario